El reto

Gracias a la empresa Beeva, donde estuve trabajando durante varios años, pude aterrizar en este reto muy interesante. Una herramienta de gestión de incidencias de los activos de la compañía (contadores y concentradores), que permitiera no solo reparar de forma remota los mismos, sino que también que permita una mejor toma de decisión en el envío de los técnicos de forma presencial.

El proceso de trabajo

Una vez realizado el análisis del presente del proyecto, ya que llegó a mis manos en una fase inicial ya ejecutada, me dediqué al montaje de los nuevos lineamientos visuales y funcionales de la herramienta. Propuse la utilización de un prototipo navegable low-fidelity (Axure) el cual nos permitiría usarlo como herramienta de validación en los diferentes sprints ejecutados. Y por otro lado, la definición de un sistema de diseño acorde a las necesidades, para que el acceso a la construcción de los componentes fuera de una forma simple y accesible a todos los integrantes del proyecto.

El resultado

Una herramienta muy versatil, eficiente e innovadora dentro de la firma. Gracias al gran trabajo realizado en el sistema de diseño, el mismo fue extrapolado como lineamientos visuales generales al resto de los productos de la empresa.